Como su nombre lo indica, este material cubre imperfecciones y rellena porosidades tanto sobre maderas macizas como en los enchapados, formando una base sólida, resistente y perfectamente nivelada, que sirva de sustento a los materiales de terminación. Es totalmente incoloro, por lo que el color debe lograrse ya sea tiñendo previamente la superficie, o bien incorporando el color a la base, recurriendo a entonadores especiales que también puede encontrar entre nuestros productos.
Desempeña el mismo rol que los selladores convencionales, con distintas características y ventajas:
Excelente resistencia a ralladuras y golpes
Economía de tiempo y mano de obra al no requerir aporte extra de material (engrose)
Prolonga la durabilidad del lustre
Preparación: las proporciones, que deben ser estrictamente respetadas en lo referido al catalizador son: dos partes de base por una de catalizador y de un 15 a un 20 % de diluyente, calculado sobre la suma de los otros dos componentes. Ej: 1 litro de base, 1/2 litro de catalizador y 225 a 300 cm3 de diluyente.
Dejar la mezcla en reposo de 5 a 10 minutos antes de utilizar.
Secado: Se produce por reacción química y por evaporación; de esta forma, el lapso necesario para proceder al lijado es de 2 a 4 hs.; utilizando medios artificiales (ej. Horno), para lo cual se proveen materiales especiales, dicho lapso puede reducirse a 40-50 minutos a temperaturas de 35 a 45 grados centígrados. En ambos casos el lijado debe hacerse empleando lija fina (280).
Aplicación: puede emplearse pincel, soplete común, cortina, inmersión y equipos especiales con recipiente presurizado.
Lo recomendable es aplicar dos manos (con lijado intermedio); en caso de utilizar soplete o equipo presurizado, deben efectuarse rápidas pasadas (2 a 3 por mano), superponiendo finas capas a intervalos de 2 a 3 minutos entre cada una de ellas, posibilitando con ello el nivelado y la obtención de un excelente cuerpo.
Se entrega en envases de 4, 10 y 20 litros.
